Enseñar a investigar: desafío en la universidad del siglo XXI

 

Enseñar a investigar: desafío en la universidad del siglo XXI. Mario Vidal Moruno

 

Artículo publicado en la Revista Educ@ción en Contexto, Vol. VI, N° Especial, julio, 2020. ISSN 2477-9296. I Congreso Internacional en Educación, CIED UDA

 

El autor, a partir de una investigación, desarrolla una propuesta orientada a la formación de investigadores con base a investigar investigando y enseñar a investigar como proceso formativo clave para la gestión del conocimiento, de manera que se responda a las necesidades de la realidad de hoy.

Esta propuesta asume al Aprendizaje Basado en Problemas (ABP) como una de las alternativas didácticas para enseñar a investigar e investigar para enseñar. La idea es formar a investigadores con actividades investigativas para aprender con la propia experiencia.

El ABP, indica el autor, permite evaluar lo que se conoce, revelar los requerimientos de aprendizaje, desarrollar y mejorar habilidades interpersonales de desempeño, comunicación y colaboración, así como alcanzar competencias investigativas.

En su investigación, Vidal identifica varios presupuestos, algunos son:

1.   Investigar es uno de los ejes fundamentales para lograr competencias investigativas.

2.   El aprendizaje de la investigación en el aula permite un trabajo cooperativo y colaborativo entre docentes y estudiantes.

3.   Las estrategias didácticas para la enseñanza de la investigación demandan una innovación en el uso de tecnologías didácticas.

4.   El uso del ABP permite el desarrollo de las competencias investigativas.

5.   El docente que enseña investigación debe tener tanto formación previa en investigación como competencias investigativas.

 

El autor afirma, el proceso de “formación para investigadores” constituye un proceso y eje central para la construcción de una cultura de investigación que provoque institucionalmente en los docentes y estudiantes una actitud investigativa y un deseo de continuar un proceso de desarrollo profesional en la educación científica.

Con el uso de una tecnología didáctica basada en el ABP, además de las TIC en el contexto de la sociedad digital, se logra mayor impacto, motivación y significatividad en la formación de actitudes positivas hacia la investigación en los estudiantes, como capital humano de talentos.

Por ello, la formación de investigadores debe partir de los momentos investigativos (semilleros de investigadores) y los docentes deben estar preparados para esa formación integral de investigadores.

 

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